El tratamiento de blefaroplastia sin cirugía con Dermaplax utiliza un dispositivo de plasma que, mediante la generación de pequeñas quemaduras superficiales en la piel, estimula la producción de colágeno y elastina.
Este proceso permite reducir el exceso de piel y mejorar la firmeza, proporcionando una mirada más fresca y rejuvenecida sin necesidad de bisturí. El procedimiento es rápido y cómodo, y se realiza bajo anestesia tópica para minimizar cualquier molestia y corregir el exceso de piel en los párpados y las bolsas.
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A diferencia de la blefaroplastia quirúrgica tradicional, este tratamiento no requiere incisiones, lo que elimina el riesgo de cicatrices visibles.
La blefaroplastia con Dermaplax tiene un tiempo de recuperación muy corto. Tras el tratamiento, es posible que aparezca un leve enrojecimiento o hinchazón que desaparece en pocos días, permitiéndote retomar tus actividades habituales casi de inmediato.
Los efectos del tratamiento son visibles en una o dos semanas, con resultados que pueden durar hasta 12 meses, mejorando progresivamente gracias a la regeneración del colágeno.
Además de mejorar la apariencia de los párpados caídos, también es eficaz para suavizar arrugas y líneas de expresión en otras áreas del rostro, como el "código de barras" en el labio superior.
El procedimiento dura aproximadamente 20-30 minutos. Durante la sesión, el dispositivo de Dermaplax genera un plasma que actúa sobre la piel, creando microquemaduras controladas que estimulan la regeneración de tejidos.
La cantidad de sesiones depende de las necesidades del paciente, pero generalmente se recomiendan de 1 a 3 sesiones para obtener resultados óptimos.
Después del tratamiento, es importante evitar la exposición solar directa y seguir las indicaciones del médico para garantizar una recuperación rápida y sin complicaciones.
El tratamiento es mínimamente invasivo y se realiza bajo anestesia tópica para evitar molestias. Durante la sesión, es posible sentir una leve sensación de calor o pequeños pinchazos, pero en general, se tolera bien. Después del procedimiento, puede haber algo de hinchazón o enrojecimiento, que desaparece en pocos días.