Dermaplax es una de las tecnologías más avanzadas en el campo de la medicina estética no invasiva, que utiliza la energía del plasma para ofrecer soluciones efectivas en rejuvenecimiento facial y corrección de imperfecciones sin necesidad de cirugía. Este dispositivo ha revolucionado los tratamientos estéticos al proporcionar resultados visibles y duraderos con un procedimiento cómodo y sin cicatrices.
Dermaplax emplea la generación de plasma, que crea pequeñas quemaduras controladas en la piel. Estas microquemaduras, lejos de dañar los tejidos, estimulan una respuesta natural de regeneración celular. Como resultado, la piel comienza a producir más colágeno y elastina, lo que mejora su firmeza y elasticidad, reduciendo las arrugas y levantando las áreas tratadas.
Estaré encantada de atenderte y valorar tu tratamiento
Al no requerir incisiones ni anestesia general, Dermaplax es un tratamiento cómodo y seguro.
No deja marcas visibles, ya que el plasma actúa solo en las capas más superficiales de la piel.
En pocas horas, el paciente puede retomar su vida normal con solo un leve enrojecimiento temporal.
La estimulación del colágeno asegura una mejoría progresiva y visible durante meses.
Sí, Dermaplax es una tecnología avalada por expertos en medicina estética, y al ser no invasiva, los riesgos son mínimos.
Dependiendo de la zona a tratar, suelen ser necesarias entre 1 y 3 sesiones de corta duración para obtener resultados óptimos.
Los resultados del tratamiento con Dermaplax suelen durar entre 6 y 12 meses, dependiendo del tipo de piel y el cuidado posterior.
Dermaplax es versátil y puede aplicarse en varias zonas del cuerpo. Es especialmente efectivo para rejuvenecer el rostro, tratándose áreas como los párpados caídos, las arrugas perioculares, y las líneas de expresión, como el «código de barras» sobre el labio. Además, puede utilizarse en el cuello, escote y manos, para mejorar la calidad de la piel y eliminar arrugas o manchas.